martes, 15 de marzo de 2016

Como el viento de poniente

Marea - Como el viento de poniente 

Vuelve Marea



Soy de los que piensan que los acústicos, por lo general, son bastante soporíferos. Hoy Kutxi Romero ha sacado su disco en solitario y en acústico "No soy de nadie", y lo poco que he escuchado, efectivamente, no me ha gustado mucho. Él mismo lo reconoció en la entrevista que le hicieron ayer en El Vuelo del Fénix de Radio 3 a propósito del nuevo disco y de los bolos que dará hasta agosto para presentarlo: "En los festivales lo único que les he pedido es que no me pongan a la una de la mañana después de Soziedad Alcohólica. Es música de siesta...". Un disco muy de estilo Kutxi: autoeditado, sin discográfica, sin merchandising; de hecho, solo se puede adquirir a través de su página web: "Para que luego no me vengáis con que los discos son caros y la droga no, he ajustado el precio a diez euros más gastos de envío".




Ahora bien, en la entrevista también soltó algunas cosas bastante interesantes, dejando a un lado perlitas muy suyas como "teníamos tantos invitados en el estudio que parecía un partido de waterpolo de gremlins" o "el libro que viene con el disco me va a salir más caro que un hijo yonki". El momento más esperado llegó sin duda cuando desveló que Marea, una de las bandas más importantes de rock nacional durante el siglo XXI y fundada por Kutxi en 1997, vuelve a juntarse cuatro años después: "Estamos con los Marea enredados haciendo cosas. Hemos empezado a juntarnos, a quitar el óxido, a enredar con canciones... Marea es todo corazón, todo de verdad y la verdad tiene su tiempo. Puede ser que dentro de un año o dos o cinco tengamos disco preparado o no. Con los Marea nunca se sabe". 



Y para celebrarlo, allá va Como el viento de poniente, versión rockera de un fandango de El Cabrero que cantó en directo con Fernando Madina de Reincidentes; de esas canciones dignas de subir mucho el volumen. Para completarlo, su tema en solitario que a mi más me gusta (en verdad me vuelve loco), tanto que llegué a dedicarle una entrada allá por noviembre del año pasado después de escucharle en directo en El Vuelo 1000 junto con Rulo, Gritando en Silencio y algunos más: Vengo del mercado.



Se acabó la "música de siesta". Vuelve Marea.




Marea - Como el viento de poniente






De niño no me gustaban los libros ni las sotanas
ni salir en procesión,
era tan desobediente como el viento de poniente,
revoltoso y juguetón,
En vez de mirar pal cielo
me puse a medir el suelo que me tocaba de andar,
y nunca seguí al rebaño,
porque ni el pastor ni el amo eran gente de fiar,
Como aquel que calla, otorga,
y aunque la ignorancia es sorda,
pude levantar la voz,
más fuerte que los ladríos de los perros consentíos
y que la voz del pastor,
Empecé haciendo carreras
por atajos y veredas muy estrechas para mí,
y decían mis vecinos
que llevaba mal camino apartado del redil,
Siempre fui esa oveja negra
que supo esquivar las piedras que le tiraban a dar,
y entre más pasan los años
más me aparto del rebaño porque no sé adonde va.



Kutxi Romero - Vengo del mercado






Vengo del quejido y del estruendo

de Montoyas y Tarantos
Vengo de un entierro por la tarde
de los duelos que vendrán
Vengo del Enrique y del Roberto
de las canas del Mercado
Vengo repleto de soledad
Vengo de la Antonia y la Paquera
vengo del de San Fernando
Vengo del que más grande la tenga
más puñao se llevará
Vengo de joder preguntadores
una en punto dos por ná
Vengo repleto de soledad
Vengo huyendo de los que enterraron
el Romance del Amargo
Vengo a que me de el viento del pueblo
que Miguel supo soplar
Vengo de subir con la marea
a encallar entre tus brazos
Vengo repleto de soledad
Vengo de regar con sol y sombra
las raíces de mi andamio
Vengo a que me violen las gaviotas
a pincharme en un rosal
Vengo de la cepa del Emilio
de cartón de contrabando
Vengo repleto de soledad
Vengo a ver como arde mi castillo
de colillas de Ducados
Vengo de la pala y el capazo
del sudor del olivar
Vengo de ese cielo que los miedos
se comieron a pedazos
Vengo repleto de soledad
Vengo huyendo de los que enterraron
el Romance del Amargo
Vengo a que me de el viento del pueblo
que Miguel supo soplar
Vengo de subir con la marea
a encallar entre tus brazos
Vengo repleto de soledad





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