lunes, 4 de enero de 2016

Jánovas Resiste

Vuelvo a los teclados más de un mes después. ¿La razón de mi inactividad durante todo este tiempo? Ni idea. Simplemente no se me ocurría nada sobre lo que escribir. Tampoco voy a pedir perdón, porque en ningún momento me comprometí a escribir cada X tiempo. Este es mi blog y hago con él lo que me sale de los *****...

Feliz año, eso sí.



Ayer volví a Jánovas. 
Ya estuvimos hace unos días, entonces sin saber la historia que tenía detrás este pueblo abandonado de la comarca del Sobrarbe (pirineo oscense), simplemente porque nos habían comentado que había por allí unas pozas bastante interesantes para ir en verano. Tras ver los carteles que daban la entrada al pueblo me salió la vena periodística y, después de una ardua investigación, tenía que volver para verlo ya desde la perspectiva del que está al corriente de el por qué de las casas derruidas... ¿Qué cuál es su historia? Pues un resumen de la misma cuelga del muro de una de las casas del pueblo...

                             

"JÁNOVAS era uno de los pueblos más prósperos de la comarca y capital de toda la ribera del Ara hasta que el mastodóntico proyecto de un embalse elaborado en los años 50, acabó por completo y de forma traumática con toda expectativa de vida. Supuso la expropiación y expulsión forzosa de más de 150 familias de los pueblos de Jánovas, Lavelilla y Lacort, a orillas del río Ara, aunque también se vieron afectados Albella, Ligüerre de Ara, Javierre de Ara, Santa Olaria, Burgasé y todos los pueblos del valle de La Solana.

A principios de la década de 1960 se iniciaron las expropiaciones forzosas y poco tiempo después, ante la negativa de algunos de ellos a marcharse, la empresa empezó a dinamitar las casas vacías sin tomar ninguna medida de seguridad para proteger la integridad de las personas que todavía residían en el pueblo, niños entre ellos.

A pesar de la prohibición de la inspección provincial de Huesca de clausurar la escuela de Jánovas mientras hubiera niños, Iberduero decidió cerrarla por su cuenta y el 4 de febrero de 1966 un operario de dicha compañía derribó la puerta, sacó a la maestra de los pelos y a patadas a los niños.

La voladura de las viviendas y el cierre de la escuela hicieron imposible seguir viviendo en Jánovas y en los pueblos circundantes, pero aún así, para acabar con cualquier intento de vuelta, Iberduero destrozó los campos, taló los frutales y olivos, destruyó las acequias y finalmente cortó el agua y la luz.

¡Todo esto sin ni siquiera haber comenzado las obras de construcción del embalse, y sin tener claro tanto la empresa concesionaria como el Estado la rentabilidad de dicha obra! Acoso puro y duro.

Ese clima hostil duró hasta 1984, año en que Emilio Garcés y Francisca Castillo no tuvieron más remedio que abandonar su hogar tras 20 años de resistencia en solitario.

En 2001, tras años de movilizaciones sociales, demandas judiciales y acciones ecologistas, se elaboró un informe de impacto ambiental del proyecto, cumpliendo así con la nueva normativa europea. El resultado fue negativo, pero el proyecto no quedó desestimado oficialmente hasta 2005.

En junio de 2008 el Ministerio de Medio Ambiente hizo pública la extinción de las concesiones de los salto hidroeléctricos de Fiscal y Jánovas, en el río Ara, y Escalona-Boltaña, en el río Cinca, definidos en la Orden Ministerial de 28 de marzo de 1951, y motivada por la imposibilidad de proceder a la ejecución de la presa de Jánovas.
Se abre ahora un proceso burocrático con el envío de las solicitudes de reversión a Endesa, la actual concesionaria, para su revisión y aceptación. Pero tanto Endesa como la Confederación Hidrográfica del Ebro sostienen que “lo justo” es pagar lo que marca la ley en estos casos o sea el precio de expropiación actualizado al IPC. (Esos intereses vienen a ser treinta veces la cantidad recibida) Se olvidan del maltrato sufrido, los acosos, del estado actual de las edificaciones (EN RUINA TOTAL), de las cientos de vidas truncadas y de los cincuenta años transcurridos sin poder disfrutar de las propiedades. Esperamos que de una vez por todas se haga
JUSTICIA."





Jordi Évole hizo un 'Salvados' contando la historia de Jánovas el pasado mes de octubre. En él, uno de los hijos de Emilio Garcés y Francisca Castillo, la (única) familia que resistió en el pueblo hasta 1984 (cerca de 20 años de resistencia en solitario), confesó ante las cámaras haber tenido que pagar ¡¡¡7.000!!! euros (si bien es lo que marca la ley...) a Endesa solo por el terreno de su casa, es decir, ¡¡¡UNAS RUINAS!!!, cuando lo que les habían expropiado años atrás era una casa hecha y derecha. Reformarla para volver a hacerla un lugar habitable, cerca de 350.000...

Dicen que un buen periodista debe contrastar las distintas posturas sobre un acontecimiento... pero es que de momento sobre la de Endesa no he encontrado nada de nada. Por lo visto pidieron dar su versión y que esta apareciese en el programa, pero la productora exigía que dicha versión fuese expuesta ante las cámaras con declaraciones de alguno de los directivos de Endesa. Y claro, en Endesa no ha gustado la idea. 

Nunca he sido muy 'fan' de los programas de Évole, y el de Jánovas, si bien es cierto que cuenta cosas muy muy interesantes y ayuda a conocer de cerca el drama de este pueblo 'víctima de un pantano de papel', creo que juega en exceso con la sensibilidad del espectador, posicionándolo de forma muy drástica en uno de los bandos...

Seguimos a la espera de novedades sobre la situación de los ex vecinos del pueblo. Reversión, SÍ, pero con justicia. 

Jánovas resiste.





















La canción: 
La Ronda de Boltaña - Habanera triste 




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